CORAZÓN PALPABLE

Hay personas que llegan al fondo de ti de una manera diferente y especial. Son personas que no te esperabas encontrar; personas que te prenden y te viven, y que, tal vez, ya conocías de otras vidas. 

Me he preguntado más veces de las que debería si me valió la pena abrirme así como lo hice; si me valió la pena arder como me dejé arder; y siempre llego a la misma conclusión después de ver que ahora mi corazón quiere sentir pa' fuera: Sí, sí me valió la pena sentir así y conocer la dimensión de mi cariño, la dimensión de mi querer. Sí me valió la pena porque ahora deseo más y deseo mejor, porque no tiene valor la vida sin sentir este fuego arrasándome entera. 

A veces te reencuentras con personas que tienes que aprender a soltar y entender que vuestro cruz, probablemente, no estaba destinado a durar más de lo que duró para enseñaros a despediros de nuevo. 

Así que desde aquí te digo "Hola", y "Ves volando hacía donde te palpite el corazón". 

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