ILUSIÓN

Sabía que esto podía pasar, simplemente preferí ignorarlo. Me gustaba la idea de empezar un nuevo curso en un lugar tan diferente. Quería formar parte de un grupo de personas afines a mi que por fin me sacarán de esta esquina de marginada social de la que siempre me ha costado salir.
Quería formar parte de algo; me había ilusionado con la idea de poder explicarle a alguien lo que estaba aprendiendo en clase, ya que son cosas que me fascinan y que me gustaba compartir.
Quería despertarme temprano y perderme por los pasillos e ir a la cafetería a por un café con mucha leche y azúcar.
Y sabía que podía quedarme sin placas pero preferí seguir con la mentira, ya que si parecía real tal vez se cumplía.

Cuando he ido al bosque a poner en orden mis ideas después de saber que estaba fuera he visto que realmente no sabía cómo me sentía. No sabía si estaba contenta o enfurecida. Supongo que un poco de ambas. Tomarme un año había estado mi idea principal durante mucho tiempo, lo tenía todo pensado, tal vez es lo que debía de hacer; pero duele. Duele porque me había ilusionado, y la ilusión es un enemigo feroz.

Así que aquí estoy ahora, a las nueve y media de la mañana estirada en mi cama ya con una sudadera puesta por el frío. Él se ha ido a la uni, besándome con un beso de desayuno, y yo he quedado para desayunar con mi persona preferida en el mundo.
Mi nueva vida comienza ahora, y es mi decisión como vivirla de la mejor manera posible.